Parque de la casa rural
Para descansar y observar la naturaleza
Cual sea su alojamiento en la propiedad (una habitación de huéspedes, el apartamento o la casa rural), aprovecharán el gran parque cerrado de paredes antiguas de piedra y su diversidad vegetal y animal.
Las personas con discapacidades podrán pasear en las terrazas y los caminos.
Esos 4 hectáreas de naturaleza, por medio salvajes, albergan flora y fauna muy interesantes, típicas de nuestra región al clima dulce y húmedo. Se dividen en varias zonas:
- el bosque de la "Garenne" o conejera
- los prados y el proyecto de estanque
- el vergel, la huerta y el gallinero
- los jardines
- el aparcamiento
- los pasillos
- las terrazas
- los edificios
La Garenne es el último vestigio de la inmensa selva que cubría la región en el pasado. Sus robles y otros arboles se reproducieron en paz durante siglos hasta la tormenta de 1999. Hoy, es un espacio natural de 2 ha donde viven erizos, conejos, pequeños roedores, insectos entre los que están muchas mariposas y libélulas, sapos y lagartos etc. Un coipo y una brocha perdidos y zorros ya han sido observados allí.
Muchos pájaros nos encantan con sus cantos y gorjeos. Para los aficionados, hay binoculares y libros de aves y mariposas en el salón. Podrán observar tórtolas, palomas, abubillas, golondrinas, búhos, lechuzas, gavilanes y halcones, picos y arrendajos, jilgueros, pinzones, mirlos, ruiseñores etc.
Por todas partes, encontrarán bancos, mesas y sillas, hamacas para descansar, mirar, escuchar.
Hay un espacio para los niños con columpios, otros para jugar al balonvolea, bádminton, ping pong o petanca.